Experiencias.
"Percibí que eras tú."
¿De dónde vendrá ese afán de reencontrarnos con lo que más repulimos, de nuevo?
"Quizás la esencia de flores rojas, al alba al caer,
Constelaciones perdidas, deseando renacer.
Fueron unas ganas, un "porque sí", solo para ti,
Pero esa sonrisa cálida,
Hizo reencontrarme con una puerta que cerré hace mucho tiempo, querida.
Tus ojos castaños, fuerzas que me levantan, sin dejarme ir,
Brazos delicados, como nieve a fluir.
De nuevo, la puerta cerrada encontré,
Y supe que eras tú, quien nunca se fué.
Donde anhelos son ilusiones, suspiros lo dicen,
La colilla de aquel cigarro cae, en el suelo se desvanece.
Recordando la puerta cerrada, pensé que se iría,
Hasta que llegaste tú, sin pena ni dolencia, yo lo sabía.
Quizás volví a un sueño, sin deseo ni regreso,
Entre tus brazos, un sentimiento tan inmenso.
Esa intimidad que evité por tanto tiempo,
En tus ojos veo que lo comprendes, tanto lo siento."
Otro poema que surge de mis reflexiones.
Pero, ¿a dónde nos lleva esto?...
NOTA DE AUTORA:
Después de atravesar un pequeño "bloqueo de escritor" durante la segunda mitad de Septiembre y principios de Octubre, finalmente resurjo con un nuevo tema de conversación en esta ocasión. Aunque, para ser sincera, no era un "bloqueo de escritor" tan grave; tenía el deseo de abordar este tema desde hace unos días, pero no me sentía lo suficientemente feliz conmigo misma como para sentarme a escribir durante horas y horas, obligando a mi cerebro, que ya estaba cansado, a pensar más y a producir poesía de calidad. Hoy vuelvo, mejor que nunca.
Dejando de lado la etiqueta de escritora, hoy quiero hablar de algo muy especial y diferente para cada persona: Las experiencias.
Hablemos en términos generales, ¿Sí? Experiencias de cualquier tipo, ya sea tu primer día en el trabajo o ir a ver una nueva película. Cualquier tipo de experiencia tiene cabida aquí. Y, justo ahora, tenía ganas de sumergirme en el mar de las "experiencias" y explorar los rincones más íntimos de las mías, sin revelar demasiado para preservar mi privacidad y la de quienes me rodean.
En el poema anterior, hablaba del redescubrimiento y la apertura a nuevas experiencias en el ámbito emocional, utilizando metáforas poéticas. Y de ahí surge la pregunta:
¿Cómo puedes descubrir una renovación en la vida después de que la llegada de alguien especial vuelva a abrir aspectos de tu existencia que habían sido cerrados y olvidados?
Sin duda, una de las preguntas más reflexivas que me he planteado recientemente.
Permítanme compartir un poco sobre la renovación de mi vida.
Al ver que esa puerta que cerré y juré no abrir de nuevo fue reabierta por una conexión tan especial e íntima con alguien, me sentí vulnerable e indefensa. Era como si un trozo de cristal estuviera a punto de caer al suelo. Por temor a que se rompiera como el cristal, traté de cerrarla de nuevo, distanciándome un poco de esa persona para evitar que los recuerdos del pasado regresaran. Eran recuerdos desagradables que quizás me quitaran el sueño una o dos noches, cosas que juré no volver a hacerme a mí misma. El miedo podía derivar de diversas razones, como el temor al dolor emocional, la vulnerabilidad o la incertidumbre que podría acompañar la apertura hacia nuevas experiencias. Cerrar una puerta en la vida puede ser una forma de protección o autodefensa contra situaciones pasadas dolorosas o emocionalmente desafiantes. Y aquí es donde entra en juego la reapertura de la puerta: Implica enfrentarse de nuevo a esos recuerdos o sentimientos, algo aterrador para algunas personas.
El sentimiento al abrir la puerta nuevamente parece ser complejo y ambiguo. Puede incluir nostalgia, la posibilidad de redescubrir alegrías pasadas, pero también el miedo a revivir heridas antiguas. Entonces, decidí darme una razón para arriesgarme a mí misma. Entre tantos pensamientos, solo una cosa vino a mi mente.
"Porque sí, solo para ti."
Realmente no encontraba una razón para abrir esa puerta de nuevo, excepto que era esa persona especial. No podía encontrar una justificación lógica o racional para sentirme tan vulnerable, pero era esa persona, y eso era suficiente. Esta reflexión sugiere una acción impulsiva; el deseo me motivó a hacerlo. Tuvo que ser una conexión o atracción tan fuerte y natural que no necesitaba una explicación detallada o una razón específica. Fue una expresión de autenticidad.
Esta apertura por parte de mi alma también buscaba un renacimiento, un cambio en mi vida.
Cuando esa puerta se abrió, vi las "colillas de cigarrillos" desvanecerse, simbolizando el abandono de viejas preocupaciones o hábitos y permitiéndome un nuevo comienzo.
La llegada de esa persona especial me dejó con un cierto pesar por el tiempo perdido al evitar las experiencias que estaban detrás de la puerta. Me di cuenta de que las cosas negativas que recordaba de esa puerta no provenían de la experiencia en sí, sino de las personas con las que compartía esas experiencias. Aunque perdí tiempo al cerrar la puerta a varias experiencias o emociones y elegí evitarlas y reprimirlas, la llegada de esa persona me llevó a reconsiderar mis elecciones pasadas, redescubrir y abrirme a nuevas experiencias emocionales. En este contexto, el "tiempo perdido" no fue necesariamente un periodo específico, sino más bien una oportunidad perdida de vivir plenamente y abrazar ciertos aspectos de la vida.
Para darte una pequeña guía sobre lo que estaba detrás de esa puerta, eran experiencias románticas que fueron traumáticas para mí, y también estaba el miedo e insatisfacción que sentía al no sentirme amada equitativamente por cualquier interés romántico que yo tenía, y las diferentes formas de expresar afecto, no solo con parejas, sino también con amigos y familiares.
Mis anhelos de conocer a una persona que tenía tan idealizada en mi mente, quizás a una "princesa azul" que viniera a rescatarme, estaban tan lejos de la realidad que tuve que aceptar por mí misma que, en ciertas circunstancias de la vida, lo que se desea o anhela no siempre corresponde completamente a la realidad. Aquí es donde los anhelos se vuelven ilusiones. Simplemente me dan ganas de suspirar por la complejidad de los deseos humanos.
Respondiendo a la pregunta inicial y cómo descubrí la renovación en una parte de mi vida actual, siento que solo hay una manera de expresarlo.
Respondería enfocándome en mi experiencia personal y emocional ya mencionada. Como dije, la llegada de esta persona actuó como un catalizador para mi redescubrimiento y reapertura de emociones que sentía prohibidas e idealizadas, que prometí no volver a sentir, que fueron cerradas y olvidadas. Destacaría la influencia positiva de esta persona y cómo la conexión con ella me renovó en cuanto a vitalidad y emoción, abriéndome a nuevas experiencias. Esta persona especial ha traído consigo una sensación de conexión y entendimiento mutuo, lo que también me lleva a una renovación en la percepción de la vida.
La manera en que acepté la vulnerabilidad fue quizás una de las cosas más difíciles que hice en mi vida.
Vivo por el cariño y el amor, una parte fundamental de mi vida marcada por varios momentos. También tengo que decir que la renovación de la vida tiene un significado polisémico para mí; cada uno lo ve y experimenta de diferentes maneras, y también tiene significados distintos. La renovación de mi vida fue un proceso de redescubrimiento emocional que esta persona me dio, un renacimiento de aspectos de mi vida que, de alguna manera, habían sido prohibidos.
Obviamente, la "renovación de la vida" también puede ser algo más profundo o aleatorio, pero, al menos, esta fue mí renovación.
Esto seguramente no podría haber sido posible sin la confianza en uno mismo y en la persona que decides amar, otorgándole una responsabilidad afectiva significativa.
Si hay algo hermoso entre ustedes, si hay brillos en sus miradas y cálidos abrazos, entonces jamás deberían buscar un "porqué" ni buscar detalles ocultos entre sus palabras. Dense una oportunidad, ya que, al fin y al cabo, también se están dando una oportunidad a ustedes mismos para descubrir una nueva faceta de ambos,
Algo tan íntimo entre ustedes que nadie más debe ni puede saber,
Una experiencia nueva.
♡..
Nota de la autora:
Estaba recostada en mi cama, cansada, escuchando música, cuando las letras de una canción me hicieron reflexionar sobre mis relaciones personales.
Decía:
"Con cada sonrisa limpias el aire
Y entonces, puedo verte.
Por favor, principito, no saques tu sonrisa de mí."
Me pareció tan hermoso que me inspiró a escribir esto. Automáticamente lo relacioné con experiencias. Además, ¡hace mucho que quería escribir!
Últimamente estoy muy ocupada, así que no puedo pasar tanto tiempo como antes escribiendo estas cosas. Además, requieren de mucha concentración y tiempo. Así que, aunque seguiré actualizando esto, ya que guardo mis escritos largos aquí, no será tan frecuente como antes. Uno o dos escritos por semana está bien.
Con eso dicho, me despido.
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